Muchas veces asociamos la idea de “regalo promocional” a un chisme barato e inútil que, más que un regalo, es una molestia. ¡Qué horror! Como amantes de los gadgets nos preguntamos… ¿cómo hemos podido llegar a asociar ambos conceptos? Que sea gratis, que sea un regalo, no tiene que implicar que sea una patraña.
Un regalo, por definición y por derecho, es una cosa que se da como muestra de afecto o de consideración. Un regalo promocional es aquel que además lleva tu marca por bandera. Cuando te planteas añadir un obsequio a tus promociones de marketing es porque quieres potenciar el mensaje que estás transmitiendo con algo tangible que lo haga real, con un recuerdo físico que haga perdurar esa campaña y además afiance tu relación con el cliente.
Nos tomamos muy en serio la impresión que dan los regalos y el daño o los beneficios que pueden causar en caso de ser (o no) acertados. No sólo se trata de elegir la mayor calidad, se trata de dar en el blanco y encajar todas las piezas para sentir la satisfacción de una campaña exitosa. Seguir leyendo...